¿Letras para amar?

Quizá con el paso del tiempo
vuelva a sentirme yo de nuevo.
Quizá con el paso del tiempo,
tu presencia solo vuelva a ser alegrías.

Y es que el cantar de tu voz,
me arrebata los sentimientos.
La grandeza de tus pasos,
me tiembla en el alma.
¿Valen las palabras
para entregarse al amor?
¿Valgo yo,
como alguna vez valí,
lo suficiente para invadir tu corazón?

Destrezas en las artes.
Tu pasión y mis letras.
Tu espíritu alegre y mis miradas tristes.
Tus llantos y mi optimismo.
Quizá, el color de la naturaleza 
sea realmente nuestro único lazo.
O es que tú,
escondida tras un lienzo en blanco,
¿me darás algún día la razón
en ser a quien escribo estos versos? 

Quizá la escritura también tenga miedo.
Miedo de amar y quedar en blanco.
Un poema en blanco,
como tu lienzo en blanco.
¿O me darías, quizá,
la oportunidad de ser quien lo pinte?
Entre tanto cuestionamiento
la verdad solo se enfría.
Huye de mi lengua y de mis dedos,
Porque sé que entre tu sorpresa,
el riachuelo que nos divide se agranda.
Y quien gobierna tu palacio
no lo hace de letras.
Aunque tu fiel seguidora aquí te espera
entre versos y caricias,
la desdicha sigue escondida.

Crónica de unos 300 días.

Se conocieron. Se quisieron. Se amaron. Se amaron. La amó. La dejó de amar. ¿Se siguen queriendo?. Están por dejarse de conocer.

En tu mente camina mi mente,
en tus manos se sujetan mis manos.
En tus labios se entienden mis labios,
mientras que en tus ojos se reflejan mis ojos.
En tu risa se escucha el eco de mi risa,
y en tu sonrisa se traza mi sonrisa.
En mi sombra se encuentra tu sombra,
a mi lado, mientras que a la luz de nuestras estrellas,
seguimos abrazándonos.